A 37 años de aquel 24 de Marzo de 1976, cuando a partir de un golpe de estado se inició la etapa más sangrienta para el pueblo argentino, el Compañero Consejero Superior de la UNER y responsable de La Cámpora Rosario del Tala se refirió sobre la importancia del proceso de reconstrucción de la Verdad que vive la Argentina desde el 2003 a la fecha.
En este sentido reflexionó, “reconstruir nuestra Memoria es parte fundamental de todo proceso que busque dignificar al pueblo, no solo una de las bases que permite demostrar quienes somos, sino también un antecedente que sirve como coordenada para la transformación del presente y posicionarnos como actores capaces de construir la historia futura.”
Agregó, “en este camino, la lucha por la verdad se torna trascendental en nuestro rol como ciudadanos pertenecientes al maravilloso Movimiento Nacional y Popular, lo que genera mayor compromiso y responsabilidad de aportar, recuperar, exigir que no haya más silencio, ni páginas en blanco que oculten el terror, tortura, muerte y desaparición sufrida por nuestro pueblo en el último Terrorismo de Estado iniciado el 24 de Marzo de 1976.”
En cuanto al presente que vivimos apuntó, “estamos viviendo un proceso revolucionario que tiene como resultado poder visualizar una década ganada, con mayor igualdad, dignidad y desarrollo social, económico, político, y porque no decirlo también cultural. Si tomamos las palabras del querido general Perón, toda revolución tiene cuatro etapas: La primera es indudablemente la preparación ideológica para la misma. En esta etapa fue fundamental la lucha de nuestras queridas Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, de cada familiar y amigo de nuestros compañeros detenidos-desaparecidos, de los militantes que sufrieron el terrorismo, y de cada uno de los ciudadanos que nunca dejaron sus convicciones.”
“La segunda etapa es la toma del poder. si nos posicionamos en la historia reciente podemos identificar el 25 de Mayo del 2003 como una fecha clave, es a partir de ahí, de la asunción de Néstor Kirchner, que en nuestro país se vivieron grandes transformaciones. Esta toma de poder permite continuar con la tercera etapa, que es la realización ideológica, es la materialización de las convicciones a partir de decisiones y transformaciones concretas, por ejemplo la derogación de las leyes de obediencia debida y punto final, la decisión histórica de Néstor Kirchner de pedir perdón, como representante del Estado, por tantos años de silencio, hacer bajar los cuadros, junto al inicio de los juicios, recuperación de hijos y nietos permite identificar un claro cambio en el paradigma del Estado Nacional para ubicar la Memoria, Verdad y Justicia en la agenda como Política de Estado”
Cabrera continuó, “ahora bien, los 37 años transcurridos de aquel golpe nos encuentra en la cuarta etapa, que es la consolidación a través de una organización que le de permanencia a estos cambios y logros. En este proceso es fundamental estar Unidos y Organizados, hay que seguir avanzando en la implementación y respeto de la Ley de Medios de la Democracia (N° 26.522)”
Prosiguió “Es ineludible destacar que en la actualidad y después de tanto tiempo de impunidad el Proyecto Nacional y Provincial nos ha permitido sacar tanta basura escondida en los diarios, ha tomado medidas que permitieron esclarecer nuestra historia, y hoy a partir de este quiebre político, ideológico y legal podemos acercarnos a los Juzgados Federales en cada juicio para verle la cara a los genocidas, pudiendo celebrar la apertura de cada causa, de cada identidad recuperada. Podemos ver maravillados como la Democracia se profundiza a partir de la posibilidad al voto que tienen los jóvenes de 16 y 17 años. Podemos identificar en el proyecto nacional una clara concepción de nacionalismo en los Reclamos por las Malvinas, en la recuperación de YPF, entre otras tantas cosas.”
Por último afirmó que “hoy más que nunca el Nunca Más se hace presente, pero para su consolidación, tener Memoria y reconstruir nuestra historia tenemos un doble desafío: El de recordar y esclarecer los sucesos relevantes que acontecieron, y el de ubicarnos en el aquí y ahora como protagonistas levantando las banderas del Pueblo para seguir construyendo una Patria Justa, Libre y Soberana, como lo hicieran nuestros compañeros Detenidos- Desaparecidos, permitiendo que llegue en toda su plenitud y junto a la profundización del Proyecto Nacional, Popular y Democrático: “La Hora de los Pueblos”